miércoles, 9 de diciembre de 2015

Artículo en Tiempo Argentino: "Mito y realidad de la coparticipación"



Mito y realidad de la coparticipación

Alfredo Iñiguez y Alejandro Otero - 08 de Diciembre de 2015 

En los últimos años, se duplicó el financiamiento del Estado Nacional a las Provincias en relación con el PBI. Desde el 2003 se mejoró la la distribución de impuestos.

Los recientes fallos de la Corte y el DNU del Poder ejecutivo en respuesta, forman parte de un largo entramado de conflictos en la relación entre el Estado Nacional y los Provinciales, que tienen su origen en la conformación misma del Estado-Nación y, es muy probable, perduren e incluso se intensifiquen en los próximos tiempos.
El debate sobre la relación Nación-Provincias suele circunscribirse a cuestiones financieras y aparece de manera recurrente en la agenda pública cuando las provincias se enfrentan a situaciones límite en su capacidad para sobrellevar una crisis. Una vez subsanadas las causas coyunturales del deterioro de las cuentas provinciales, el tema sale de agenda y todo vuelve a parecerse al  período inmediato anterior.
Se pospone así  discutir el federalismo fiscal en su conjunto. Encararlo supone encausar el debate hacia aspectos más estructurales. En efecto, la Ley 23548 de Coparticipación Federal de Impuestos, promulgada en enero de 1988, es la que determina la distribución de la recaudación nacional (masa coparticipable) entre la nación y las provincias y luego entre cada una de ellas. Curiosamente se trató de una Ley Transitoria que debería haber regido sólo por dos años pero aún tiene vigencia. Al poco tiempo de su aprobación se empezaron a realizar modificaciones que alteraron la distribución determinada por ésta, en especial en la participación que les corresponde a la Nación y a las Provincias, en detrimento de estas últimas.
Además de la hoy tan mentada detracción del 15% de la masa coparticipable (desde 1992) y del 1,9% del total de los recursos que se extraen del IVA (desde 2001) sobre los que falló la Corte Suprema, se pueden mencionar:
1) En el impuesto a las Ganancias se detrae el 20% y en el IVA el 11% de la recaudación, para financiar el sistema previsional. Además, en Ganancias rigen mecanismos alternativos para asignar recursos a las provincias que determinan que sólo ingresa a la masa coparticipable el 64% de lo obtenido por este impuesto.
2) En varios impuestos, como Bienes personales, Monotributo, Créditos y Débitos Bancarios, entre otros, las provincias reciben parte de la recaudación pero con parámetros distintos a los de la ley y se detrae parte de los ingresos para otros destinos.
Todas estas medidas se tomaron en la década del 90 y la última de las detracciones, la del impuesto al Cheque, se aplicó entre 2001 y 2002.
Cabe señalar que estos cambios y particularidades fueron consentidos por las provincias por distintos motivos. Pero no fueron imposiciones del Estado nacional hacia ellas.  
Estas no fueron las únicas detracciones a la masa coparticipable realizadas durante el Plan de Convertibilidad. En la década del 90, continuando la “descentralización” de las escuelas realizada en 1978, se terminaron de transferir a las provincias todos los establecimientos de nivel primario, secundario y terciario y se traspasaron también los hospitales, que hasta ese entonces se administraban desde el Estado Nacional. El traspaso de estas funciones a las provincias se hizo sin los recursos financieros necesarios. El financiamiento básico se extrajo de la propia coparticipación y como una suma fija.
A su vez, en el año 2001 se dispuso el pago a cuenta del IVA de una proporción de las contribuciones patronales a la Seguridad Social, definida en puntos porcentuales del IVA, según la región geográfica en la que se realice la actividad . En este caso, las transferencias a provincias se ven reducidas porque el pago inicial de las Contribuciones no se coparticipa y reduce el pago del IVA que sí es coparticipable.
Desde el año 2003 en adelante no se concretó ninguna medida que fuese perjudicial para las provincias en la distribución de impuestos. A pesar de lo que se ha instalado como si formara parte del sentido común, en los últimos años el financiamiento del Estado Nacional a las Provincias, lejos de contraerse, creció y lo hizo de manera significativa, al punto de duplicarse en términos del PBI. La situación financiera de las provincias mejoró, en especial en comparación con su situación a la era neoliberal y su deuda se retrajo significativamente en los últimos años.
En conjunto, los recursos que el Sector Público Nacional remesa a las provincias se mantuvieron alrededor del 5% del PIB en todos los años de la década del 90 y empezaron a crecer a partir de 2004 para acercarse al 7% desde 2005 hasta 2008. En el año 2009, un nuevo incremento, en este caso exclusivamente en las transferencias presupuestarias, permitió que esta relación superara el 7% del PBI. A partir de allí continuó su tendencia alcista, en este caso explicada por vía de los recursos de origen nacional (RON) que llevaron las remesas a provincias a casi el 9% del PBI en el año 2014 y se acercarán al 10% del producto cuando finalice 2015.
Tanto las transferencias presupuestarias como los RON tuvieron un alza a lo largo del período. Los RON pasaron de poco más de 4% del PBI en los años 90 a superar 6% desde 2012 y llegar al 7% del producto en 2014. Al interior de esta fuente, la Coparticipación es la que explica esta expansión, al duplicarse en términos del producto al pasar de representar cerca del 3% del PBI en los 90s a casi el 6% del producto en 2014 y 2015. Las transferencias presupuestarias, por su parte, pasaron de representar alrededor de 0,5% del PBI en los años 90 a superar el 1% del producto desde el año 2005. En 2009 y 2010, en respuesta a la crisis internacional, se incrementaron las transferencias presupuestarias a provincias que se acercaron a 2% del PBI, consecuencia –principalmente– del incremento de aquellas destinadas a financiar erogaciones de capital, incluidas las originadas en el Fondo Federal Solidario (FFS) que proviene de las retenciones a la soja y sus derivados.
El incremento de las remesas del Estado Nacional a las provincias y la CABA ( Cuadro I) tuvo como correlato una mejora sustancial en las cuentas públicas del conjunto, que permitió alcanzar el superávit financiero en la 6 de los últimos 12 años, una situación extraordinaria en la historia argentina.
La asistencia financiera del Estado Nacional a las provincias no se limitó a acrecentar los recursos transferidos, también jugó un rol importante la política de refinanciación de deudas con varios programas aplicados en los últimos años, que les permitieron a los Estados Provinciales alcanzar una drástica reducción de sus Deudas. Durante la era neoliberal el Stock de Deuda medido en relación a los ingresos totales (tanto los propios como los remesados por Nación) tuvo una clara tendencia creciente que llegó a representar el 100% en el año 2001 y
superó el 200% al año siguiente cuando se empezaron a recuperar las cuasi monedas que tuvieron que emitir para sobrellevar el descalabro financiero en que se habían sumergido como consecuencia de la crisis de la convertibilidad. A partir de allí, la Deuda cambió su tendencia y empezó a descender de manera consistente hasta llegar al 27% de los ingresos en 2014. Con el colapso de la convertibilidad, las provincias necesitaban 1 ó 2 años de ingresos para cubrir su deuda y en la actualidad les alcanza un cuarto de año para hacerlo.  A modo de corolario, se podría decir que, a pesar de los problemas estructurales que tienen los Estados Provinciales, en los últimos años se había logrado cierto equilibrio, aunque inestable, en materia financiera al restituir con creces las quitas que se habían efectuado a las provincias en la era neoliberal. La inexistencia de una necesaria nueva Ley de Coparticipación no fue impedimento para que los gobiernos subnacionales mejoren su situación después del descalabro de la era neoliberal, aunque la cuestión de fondo haya quedado irresuelta.
Los fallos de la Corte Suprema dañaron ese equilibrio al beneficiar sólo a 3 de las 24 jurisdicciones subnacionales, poniendo en riesgo además la sustentabilidad de todo el sistema de la Seguridad Social al instalar la discusión del principal financiamiento adicional que tienen los beneficios contributivos. Ante este panorama, el Poder Ejecutivo con el DNU resolvió los dos problemas derivados de los fallos: poner en un plano de igualdad a todos los Estados Provinciales y evitar el desfinanciamiento de la Seguridad Social al disponer que la merma de recursos fuera cubierta mediante rentas generales de Tesoro.
Reducir la relación nación provincias a la dimensión financiera tiende a simplificar el problema que es esencialmente político y remite a la forma en que se articula y construye el poder territorial. Las asimetrías regionales en la distribución del ingreso y la riqueza que caracterizan a nuestro país reclaman desde hace décadas una revisión profunda del federalismo fiscal. Sin embargo, tendemos a disputar por una frazada corta.


martes, 17 de noviembre de 2015

L@s profesionales de Ciencias Económicas respaldamos el desarrollo con inclusión social



L@s graduad@s de Ciencias Económicas expresamos nuestro apoyo al candidato del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, a través de una solicitada -firmada por más de 300 académicos de todo el país- publicada hoy en diferentes diarios. Porque, tal como lo expresamos en el documento difundido, no somos neutrales ante el proceso electoral donde l@s argentin@s deberemos elegir entre seguir construyendo un país para tod@s en base a un modelo de desarrollo con inclusión social que fortalece el mercado interno y prioriza una inserción externa en base a la industria y al conocimiento, o "cambiar" para volver a un modelo neoliberal que promueve políticas de ajuste, endeudamiento externo, liberalización económica, apertura comercial y la reprimarización productiva.

Por eso el 22/11 votamos a Daniel Scioli, para una Argentina más justa, con más desarrollo y más inclusión.


viernes, 22 de mayo de 2015

Porqué la hegemonía financiera global sí importa para el modelo de País

Esta semana en Punto de Encuentro analizamos porqué la hegemonia mundial de los sectores financieros internacionales -que entró en crisis pero no ha muerto- debe entenderse como un factor de poder de gran incidencia al momento en el que Argentina defina el camino post 2015: volver a la acumulación financiera o continuar fortaleciendo un proyecto productivo, con empleo y bienestar social: http://bit.ly/1cSEuYy


miércoles, 22 de abril de 2015

El ajuste profético, lo que hay detrás y cómo superarlo

¿Qué hacer frente a las profecías sobre el inevitable destino de ajuste y devaluación que los profetas de siempre anuncian para nuestro país? Días atrás participé una vez más del programa Punto de Encuentro, charlamos sobre el trasfondo político detrás de lo que aparece como "medidas económicas"; y analizamos las alternativas que podemos implementar como país para seguir apostando al crecimiento y la inclusión social: http://bit.ly/1EcysMS


martes, 21 de abril de 2015

¿Por qué votamos a Ibarra para Jefe de Gobierno?

Por que es quien está en mejores condiciones de disputarle la Ciudad al PRO.

En efecto, las PASO en el Frente para la Victoria (FPV) de la Ciudad fortalecen a todo el espacio político que acompaña al proyecto nacional y respalda al gobierno de Cristina. La diversidad de candidatos a Jefe de Gobierno enriquece y amplía ese espacio y permite saldar democráticamente dos debates que atraviesan al FPV de la Ciudad desde hace tiempo. Uno, ¿Cómo se construye la fuerza propia y qué perfil debemos darle?. Dos, ¿Cómo se genera, de cara a esta elección, una alternativa con perspectiva de poder para ganar el gobierno de la Ciudad?.

Nosotros pensamos que la fuerza propia requiere pluralidad y amplitud y que debe darse un perfil decididamente frentista, siguiendo la tradicional construcción de los movimientos populares de nuestra historia, en la que el actual se inscribe. Por eso unificamos listas de legisladores y comuneros con los compañeros del Partido Solidario y el Movimiento Evita.

Y pensamos también que, de cara a la elección del próximo Jefe de Gobierno, debemos aglutinar al FPV y sumar más allá del FPV. Digámoslo claramente, para construir una alternativa con perspectiva de poder en estas elecciones en la Ciudad hay que sumarle al FPV todas aquellas voluntades de cambiar en la Ciudad. Hay que llegar a la segunda vuelta con el FPV y después sumar para ganar. Y hoy estamos en condiciones de lograrlo.

Es en este escenario que Aníbal Ibarra, por experiencia, convicción y claridad de proyecto, es quién mejor expresa dentro del FPV la posibilidad de aglutinar y sumar para derrotar al neoliberalismo tardío de Macri en la Ciudad.

Por eso, para ganar, el domingo votamos a Aníbal para Jefe de Gobierno.

Alejandro Otero
Precandidato a Legislador
Frente Grande
Frente Si - FPV

Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 20 de Abril de 2015.-

Aguafuertes fiscales porteñas #03: "El déficit de la Ciudad"



sábado, 18 de abril de 2015

Hoy en la esquina de Independencia y Defensa, junto a l@s vecin@s de San Telmo, militando la campaña con Aníbal Ibarra Jefe de Gobierno.

jueves, 16 de abril de 2015

Aguafuertes fiscales porteñas

¿Sabías que...?
Los giros desde Nación a la Ciudad crecieron exponencialmente: en 2014 alcanzaron a 6.700 millones de pesos, monto 2.692 por ciento superior al del promedio 2000-02. El estimado de este año alcanza al 10 por ciento del presupuesto.

Este es un incremento genuino de la recaudación propia de la Ciudad y que, a diferencia de los impuestazos del PRO, no afectó al bolsillo de los porteños.



lunes, 13 de abril de 2015

CABA: Entre los dichos y los hechos imponibles

"El impuestazo de la ciudad en los dos mandatos PRO no registra antecedentes y se refleja en el aumento de la recaudación: 600 por ciento entre 2007 y 2014. En todos los impuestos la gestión Macri aumentó tasas y/o amplió su base imponible. Los cambios más radicales fueron en el Inmobiliario (ABL) y en Sellos, pero también se elevaron las alícuotas en varias actividades de Ingresos Brutos y en las patentes de los automotores. Se completa así el cóctel de impuestazo y endeudamiento que en materia fiscal caracteriza a la ciudad desde que Macri asumió como jefe de Gobierno".

Comparto el artículo que hicimos junto a Alfredo IñÍguez "Entre los dichos y los hechos imponibles", publicado el sábado pasado en Miradas al Sur, en el cual repasamos cuáles son los factores que expican porqué hoy l@s porteñ@s financiamos el presupuesto más alto de la historia de la Ciudad -casi 90 mil millones de pesos previstos para 2015- mientras los grandes problemas -vivienda, salud, educación, transporte, higiene, inundaciones y seguridad- perduran en la agenda de las cuestiones irresueltas del día a día de nuestra Ciudad: http://bit.ly/1yk7UZd


domingo, 5 de abril de 2015

Nota sobre la Ciudad en Miradas al Sur

"En la segunda mitad de la década de los noventa, la deuda de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires representaba alrededor del 5 por ciento en el total de las 24 jurisdicciones del país; durante el gobierno de Aníbal Ibarra este porcentaje se redujo paulatinamente hasta el 2 por ciento y a partir del año 2010 -gobierno del PRO- recuperó su tendencia creciente hasta explicar cerca del 7 por ciento a partir del año 2013. En otras palabras, mientras las provincias reducían su deuda pública, en la Ciudad y con la gestión actual, no paraba de crecer".

Comparto el artículo que hicimos junto a Alfredo IñÍguez "Déficit fiscal y deuda, el legado que no se ve", publicado hoy en Miradas al Sur, en el cual analizamos algunos factores para entender porqué, mientras el macrismo reclama a los demás el equilibrio presupuestario y las finanzas “sanas”, lleva al galope al Estado porteño hacia el déficit y el endeudamiento acelerado: http://bit.ly/19V0JLu


jueves, 2 de abril de 2015

Entrevista en Radio Cooperativa

Días atrás me entrevistaron en el programa Dame una Señal de Radio Cooperativa. Allí compartí mis propuestas como precandidato a legislador por la Ciudad de Buenos Aires, junto al candidato a Jefe de Gobierno Aníbal Ibarra http://bit.ly/1DuOxgJ


martes, 17 de marzo de 2015

Con l@s compañer@s de la Corriente Fundadora UNM

Junto a l@s compañer@s de la Corriente Fundadora Universidad Nacional de Moreno; docentes, no docentes y estudiantes, en la Plaza de los dos Congresos durante el último discurso de la Presidenta Cristina Fernández ante la Asamblea Legislativa.


domingo, 8 de marzo de 2015

EL FRENTE GRANDE EN EL FRENTE Y EN LAS PASO

Ayer presentamos, junto a los compañeros Jorge Taiana, Carlos Heller y Aníbal Ibarra, una propuesta común de precandidatos a legisladores y comuneros para las próximas Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, de las cuales participaré como precandidato a legislador.

Convocamos a tod@s l@s porteñ@s a sumarse activamente con su voto para construir una Ciudad inclusiva y democrática, con ejes en la salud, la educación, la seguridad, el transporte y la vivienda. Vamos a sumarnos para ganar, gobernar y transformar la Ciudad de Buenos Aires.


miércoles, 18 de febrero de 2015

Repudiamos las maniobras golpistas. Todos junto a la democracia

Un conjunto de organizaciones políticas y sociales, así como dirigentes y personalidades del campo popular, expresaron su fuerte rechazo a la campaña de desestabilización golpista que tiene su expresión inmediata en la convocatoria a la marcha del 18 de febrero y en las groseras, infundadas e inusitadas acusaciones contra la Presidenta de la Nación.

El fiscal Pollicita, que hoy pide la imputación de Cristina, basado en un conjunto de mentiras y elucubraciones sin base, es el mismo que fuera relacionado con el ex-agente de la SIDE Raúl Martins, su ex-jefe Stiuso y, lo que es mucho más grave, con Macri y su gente en Boca, como fuera denunciado ya en 2012.

Esto forma parte de una maniobra de un sector de la "familia judicial" que no trepida en poner en peligro la democracia y la división de poderes. A esto se suma la manipulación aberrante de los medios hegemónicos que buscan construir una "verdad" que no tiene ningún fundamento y es claramente destituyente.

Hoy más que nunca ratificamos la férrea defensa de la democracia y sus instituciones y nuestro compromiso con el proyecto nacional, popular, latinoamericanista que expresa sin niguna duda el gobierno y la compañera Cristina.

Eduardo Sigal, Javier Hermo, Alejandro Otero (Frente Grande), Aníbal Ibarra, Fernando Muñoz (Frente Progresista Popular), Zaida Chmaruk, Alejandro Forni, Quique Guglielmotti (Partido Comunista), Pedro Wasiejko,  Eduardo Menajovsky (PPT), Marcelo "Nono" Frondizi (Agrupación Envar El-Kadri), Antonio Cartañá




martes, 10 de febrero de 2015

La Ciudad del 2020

 Por Alejandro Piter Otero*

¿De dónde partimos?

La Ciudad es hoy el distrito más rico de la Argentina. También el más desigual. Las mayores muestras de riqueza conviven de modo obsceno con la exclusión y la pobreza extrema. La Ciudad cuenta con recursos propios abundantes, infraestructura urbana de servicios muy por encima de la media del país y un capital humano extraordinario. Sin embargo, su desempeño económico en términos de crecimiento y empleo fue decepcionante, muy por debajo de la media del país. Y, lo que es aún más preocupante, las desigualdades se agigantaron estos últimos años y sobre esa brecha se extendieron problemas complejos como las adicciones y el comercio ilegal de sustancias nocivas, generando en algunos barrios un clima de violencia inaceptable e inédito para una Ciudad como la nuestra. 

Esta resultante nada tiene de natural o azarosa. Es en gran medida el producto de las políticas aplicadas desde el gobierno de la Ciudad.

En efecto, la respuesta de la gestión del PRO en la Ciudad a todos los desafíos que enfrentó fue la misma: impuestazo y endeudamiento. Sistemáticamente, desde el inicio de su gobierno en 2007 y año tras año, nos ofreció un cóctel combinado con dosis crecientes de estos dos amargos ingredientes. Cualquiera sea la cuestión que  enfrentó en la gestión de gobierno: la seguridad, el impacto de las inundaciones, el mantenimiento urbano o la recolección de residuos, el macrismo siempre tuvo una misma “solución” a mano: impuestazo y endeudamiento. Con la más reciente y demorada aceptación del traspaso del subte, la receta se reiteró. Y ahora para hacer frente a los vencimientos del endeudamiento creciente, se busca nueva deuda para poder financiarlos.

De tal dudosa suerte, hoy los porteños financiamos el presupuesto más alto de la historia de la Ciudad, casi 90.000 millones de pesos, sin que ninguno de los grandes problemas se vean resueltos. En efecto, vivienda, transporte, higiene, inundaciones y seguridad perduran en la agenda de las cuestiones irresueltas a pesar de que los impuestos que pagamos y el endeudamiento de los porteños crecen año tras año.

Si bien el más comentado es el incremento del llamado ABL, que en promedio este año subió un 25% y continuará subiendo hasta alcanzar el 1% del valor fiscal del inmueble, porque así lo manda la Ley, todos los demás gravámenes de la Ciudad se incrementaron. Ingresos Brutos en varias actividades, las patentes de los automotores y el impuesto de sellos, que son los principales recursos de la Ciudad e impactan de lleno en el bolsillo de los porteños, subieron sensiblemente durante estos 2 mandatos de gobierno PRO. 

Paradójicamente, año tras años el presupuesto muestra niveles de subejecución escandalosos. ¿Dónde?, justamente en el gasto social y la infraestructura pública. Es decir, se invierte menos en aquellas cuestiones que tienen mayor impacto en los sectores populares pero se incrementan las contribuciones de los sectores populares.

Lo curioso es que estos aumentos de impuestos se dan en el marco de un crecimiento fenomenal de la recaudación producto de la bonanza económica que impulsaron los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner y del incremento de precios que, como sabemos, nos perjudica a la mayoría pero beneficia al fisco porque recauda más. Incluso crecen los recursos que la Nación gira a la Ciudad, para el año que comienza se estiman en 7.600 millones, es decir un 10% de los ingresos tributarios de la Ciudad.

Con todo y mientras que en la recaudación nacional crecieron los impuestos progresivos, en el caso de la CABA se observa la tendencia contraria. En efecto, los recursos que provienen de los sectores de mayor capacidad contributiva pasaron de representar un 18,5% del total en 2007 al 12,3% en 2015 según la proyección presupuestaria. 

Con esta tendencia retrógrada mucho tiene que ver la reforma del inmobiliario (ABL), que fue presentada como un avance para ganar progresividad en el sistema, pero que resultó todo lo contrario. Dos son las razones que desmienten el argumento macrista En primero lugar, se impuso una  contribución mínima de $600 anuales ($300 para el impuesto inmobiliario y $300 para el ABL), lo que significó aumentos muy elevados en las propiedades de menor valor, que por ende contribuían menos. En muchos casos este incremento superó el 500%. Es decir que los propietarios e inquilinos de propiedades de menor valor hicieron el mayor esfuerzo.  En segundo lugar, la última reforma estableció una reducción de tramos sobre los que se aplica la alícuota, pasando de 15 a 7, junto con una reducción en la brecha existente entre la alícuota mínima y la máxima. Ambos factores restan progresividad al tributo. De modo que las históricas asimetrías e inequidades verticales y horizontales de este impuesto no solo no se han resuelto, en muchos casos se han agravado.

En tanto no se realice un cambio radical en el método de valuación de los inmuebles de la Ciudad los problemas persistirán y las “reformas”, como en este caso, desnudan más temprano que tarde su objetivo meramente recaudatorio. 

Pero además y en paralelo en la Ciudad crece la deuda. El endeudamiento del Gobierno de la Ciudad se cuadruplicó (y más) durante la gestión de Macri al pasar de U$S 500 millones en 2008 a U$S 2.100 millones en 2014.

Llama la atención que, en un sentido contrario al de la Nación y las Provincias, que han disminuido el peso de la deuda sobre el gasto y se alejaron del endeudamiento en dólares, la Ciudad incrementa su deuda en dólares. ¿Porqué la Ciudad se endeuda en dólares para financiar un déficit en pesos? ¿Genera dólares la Ciudad?, NO. ¿Entonces? Al margen de los que le prestan y los comisionistas que intervienen en estas operaciones, ¿quién se beneficia con el endeudamiento en dólares?      

La política de endeudamiento de Macri llevó a que en poco más de un lustro la Ciudad pasé de ser un Estado casi sin deuda a uno que tiene un ratio de Amortizaciones e Intereses de Deuda Pública sobre Ingresos Corrientes de 10,51% para 2015, uno de los más elevados de su historia.

En el cuadro que sigue puede verse la evolución del endeudamiento en la Ciudad, los números son elocuentes. 


En definitiva, la gestión del macrismo en la Ciudad ha significado una fenomenal transferencia de recursos desde los sectores populares, que contribuyen de modo creciente, hacia un grupo reducido de sectores concentrados. Contratistas y concesionarios de obra pública, especuladores financieros e inmobiliarios y la sobre expansión de la estructura con cargos de jefatura (gerencias) y del gasto en publicidad rigen el destino de las finanzas públicas en la Ciudad y resultan claros beneficiarios de la orientación del actual gobierno porteño. Una experiencia conocida y tardía del neoliberalismo a escala urbana. Una experiencia a superar definitivamente.

 ¿Hacia dónde creemos que debemos ir?

Superarla requiere construir una fuerza política amplia y plural que sea capaz de ganar, gobernar y transformar la Ciudad de cara al 2020 y un conjunto de puntos de atención sobre los cuales transformar nuestra Ciudad para que sea definitivamente un modelo de desarrollo urbano equitativo y sustentable.

Esos puntos, a nuestro entender, implican de mínima: recuperar el Puerto, profundizar la descentralización, consolidar la metropolitanización y democratizar el acceso a la seguridad y la vivienda.   

• El Puerto, hoy en manos del estado nacional, esa paradoja en la Ciudad de Bs As de ser porteños sin puerto, implica recuperar una fuente extraordinaria de recursos sin afectar los bolsillos de los porteños y que hoy, más que la nación, apropian los concesionarios privados que explotan el comercio exterior argentino. Pero también abre a la posibilidad de repensar radicalmente el desarrollo urbano y medioambiental de la Ciudad.

• Profundizar la descentralización implica superar la brecha que hoy existe entre las instituciones de la Constitución local, modernas y ambiciosas y un estado y un modelo de gestión que, lejos de ser bobo, sirve bien a los intereses de unos pocos que hacen de las ineficiencias y la corrupción sus ganancias. Solo por poner un ejemplo obvio; el interés colectivo reside en que un bache, una vez reparado, no se repita. Pero hay a quien le sirve que se reitere con la mayor frecuencia posible. ¿Qué sucede con los baches de su barrio? ¿Se trata de un estado ineficiente o de un estado que le hace el juego a determinados contratistas?

• Metropolitanizar, un movimiento de gestión que debe ir en paralelo con la descentralización para superar el estado actual y lograr una gestión de gobierno eficiente y democrática, implica abordar temas complejos junto a la Nación y la Provincia de Bs As: transporte, seguridad, higiene urbana, salud y educación -al menos- son un puñado de cuestiones que requieren una gestión coordinada entre estas tres instancias de gobierno para superar los nudos gordianos que se generan al persistir en intentar darles resolución local a problemas que en la actualidad tienen dimensión metropolitana.

• Democratizar el acceso a la seguridad supone avanzar hacia una sola fuerza policial  en el territorio porteño, con conducción civil y elección de los comisarios por comuna y coordinar con los vecinos los programas de prevención del delito. La prevención del delito no es una cuestión que atañe solo a la policía. Cada uno de nosotros sabe los problemas que se han enquistado en su barrio. La participación es un marco para poner en políticas eficaces ese conocimiento.

• Democratizar el acceso a la vivienda supone garantizar a todos los habitantes de la Ciudad el acceso a una vivienda digna en zonas urbanizadas. La combinación de las políticas de desarrollo urbano, con el financiamiento y la construcción de viviendas populares debe resolver en pocos años lo que el mercado inmobiliario, hoy rey y señor de los destinos de la deriva urbana de la Ciudad, nunca logrará.  

No se trata solo de dar respuestas técnicas a los problemas de la Ciudad y de contar con el equipo de gestión adecuando, se trata de articular y darle poder a un Proyecto Político que pueda vencer a los poderosos intereses que, al amparo del macrismo, quieren que nada cambie en la Ciudad y nos contentemos con el metrobús, la veredas coquetas y la ornamenta de la metropolitana.

La Ciudad tiene las condiciones para forjarse otro destino. Se trata de hacerlo posible de acá al 2020.                     





* Alejandro Otero es candidato a legislador por el Frente Grande. Forma parte del FPV. Fue Director General de Rentas de la Ciudad (2000/06) y fue Director en distintas direcciones de la AFIP. Es Profesor universitario y se graduó como CPN y Magister en Administración Pública (UBA)  

lunes, 2 de febrero de 2015

97° aniversario del PC

Junto a los compañeros Javier Hermo, presidente del Frente Grande de la Ciudad de Buenos Aires; y Patricio Echegaray, secretario general del Partido Comunista, en la celebración del 97° aniversario del PC. ¡Felices 97 años de lucha, compañeros!

jueves, 29 de enero de 2015

Charla sobre la Ciudad con la Mesa de la CPP

Días atrás compartimos una charla sobre la Ciudad junto a l@s compañer@s de la Mesa Ejecutiva de la Convergencia Popular Porteña.

[Fotos: Gentileza Anibal Gotelli]